Un error del técnico Paco López al alinear al guardameta del Recreativo Granada, Adri López, podría dejar fuera a los nazaríes tras vencer por 0-3 al Arosa.
Noche sin duda de mucho estrés y bochorno la que se va a vivir en las oficinas del Granada CF. Tras confirmarse la alineación con la que el conjunto andaluz saltó al césped del Estadio de A Lomba, pudimos ver como Adri López, portero militante del filial rojiblanco, fue el escogido por su técnico para defender la meta de los granadinos, decisión que a la postre, a terminado generando un drama absoluto entre los directivos rojiblancos y provocando un bochorno para el club como institución.
Porque, desde mi juicio, no tiene ningún tipo de perdón posible que con los recursos de los que disponen, tanto la directiva del conjunto nazarí como su cuerpo técnico, se les haya podido escapar el detalle de que el escogido para ubicarse bajo los palos en este duelo copero no cumple con la normativa establecida por la RFEF para la disputa del mismo. El fallo se da al ser el jugador catalán un portero mayor de 23 años, estar inscrito en el equipo «B» y disputar una competición no profesional, como lo es la Copa del Rey.
Esto pone de manifiesto, una vez más, que el Granada este año se encuentra inmerso en una dinámica negativa, de la cual no parece mostrar atisbos de mejora, y que con situaciones como la de hoy acrecientan el bochorno que está mostrando el conjunto nazarí en la campaña 23/24. Bien es cierto que todavía el juez debe dictar sentencia ante este suceso y que el Granada, por el momento, continúa vivo tras golear al Arosa por 0-3 en Pontevedra, pero la situación no parece transmitir tranquilidad entre los directivos andaluces.
Sin duda una situación que pone de manifiesto el escaso control que tiene el navío nazarí, del cual ni directiva, ni técnico, ni jugadores son capaces de enderezar el rumbo y poner mano firme sobre el timón para hacer que este barco deje de navegar a la deriva y ponga rumbo hacia una salvación, que con la situación que se vive actualmente en el club, parece más un sueño que una realidad.