Una moda llamada Dimitrievski

Fabrizio Romano destapó esta semana el rumor de varios clubes españoles por el portero tendencia de La Liga. Ahora bien, ¿Hay posibilidades reales de que el macedonio salga de Vallecas?

Sevilla y Villarreal. Estos son los dos nombres que el prestigioso periodista italiano lanzó a la palestra hace unos días. El fin de contrato de Stole Dimitrievski (2024) y sus últimas actuaciones destacables, han provocado que el arquero sacado por Luis Llopis en el Granada sea el guardameta de moda de La Liga 23/24. Desde que subiera a sus redes sociales una foto con la mítica elástica rosada de Gianluigi Buffon en la Juventus del 2003, Dimi no ha parado de ascender de forma meteórica.

Y así lo reflejan los datos. Ya no es el partido en el Santiago Bernabéu, donde ni de lejos ha sido su mejor actuación de le temporada. Hablar de Dimitrievski es hablar del segundo portero de La Liga que más paradas realiza. Con 51, sólo es superado por Filip Jörgensen, precisamente, perteneciente a ese submarino amarillo que estaría interesado en el guardián rayista. Ahora bien, empieza a notarse una percepción en el aura muy clara: el Rayo Vallecano es su casa.

El club de la franja ha sido quién ha confiado en su progresión. Titular con Macedonia, Dimi está viviendo su prime. La cuestión es sencilla: ¿Sería el mismo sin Vallecas? La duda colea, pero ya afirmó que su sueño es quedarse y renovar. Por si acaso, el Rayo Vallecano cuenta con Dani Cárdenas y no hay que olvidarse del joven prometedor Miguel Ángel Morro, cedido precisamente al Villarreal B.

Quiere ser el hombre récord

Con seis porterías a cero, el único con este dato junto a Marc Andre Ter Stegen, Dimitrievski aún está enrabietados por quedarse a una imbatibilidad de Pedro Contreras en una misma temporada, exactamente, con 10 (1996-1997). Una marca que ahora sí que parece asumible, ya que no se ha disputado ni la mitad del campeonato. Además, no hay que olvidar que esté récord se uniría al logrado de ser el cancerbero con más porterías con el candado puesto de toda la historia de la entidad franjirroja.

En definitiva, las ofertas llegan, pero el futbolista de 29 años sabe que su nombre puede estar enmarcado en las calles de unos de los barrios más populares de España. Es quedarse en la entidad donde una afición, como la rayista, mostró su apoyo en las malas para que ahora sea el hombre más determinante de los de Francisco o, por contra, acudir a otro equipo donde no se sabe si será la opción número 1 o simplemente se fichó porque su rendimiento individual estuvo de moda. Mientras, el Rayo Vallecano seguirá actuando como últimamente hace, como un colectivo competitivo que sabe hacerse el sordo ante los rumores del mercado.