Gloria blanca: El Real Madrid gana por 4-2 al Nápoles en su quinta victoria en Champions
Apasionante noche de Champions entre el Real Madrid y el Nápoles en el Santiago Bernabéu. El Real Madrid ganaba por 4-2 y aunque ya estaba clasificado para octavos de la Champions, se posicionaba como primero de Grupo C, mientras que el Nápoles quedaba segundo tras un encuentro que fue un torbellino de emociones y giros dramáticos.
El Nápoles sorprendió temprano en el minuto 9′, cuando Simeone aprovechó la distracción de Bellingham en la marca sobre Giovanni Di Lorenzo, quien recibió un centro de Khvicha Kvaratskhelia. El lateral italiano habilitó a Simeone, que no desaprovechó la oportunidad en boca de gol, adelantando al equipo visitante 0-1. Sin embargo, la alegría napolitana fue efímera. Apenas tres minutos después, en el minuto 11, Rodrygo devolvió el golpe. Anguissa perdió el balón en la medular bajo la intensa presión de Brahím Díaz, quien recuperó y condujo hacia la izquierda. Rodrygo, en racha, recibió el balón, encaró a su marcador y soltó un espectacular zapatazo que se anidó en la escuadra, igualando el marcador 1-1.
El Real Madrid tomó el control del juego, y en el minuto 22′, Jude Bellingham escribió su nombre en la historia del partido. Con el conjunto blanco tocando el balón con paciencia, David Alaba sirvió un preciso centro hacia Bellingham. El mediocampista inglés se desmarcó perfectamente de Natan y conectó un cabezazo imparable, dando la vuelta al marcador y poniendo al Real Madrid 2-1 arriba. El talento de Bellingham no se detuvo en su gol. Superando los diez tantos en la Champions, se convirtió en el primer inglés en alcanzar la doble cifra antes de los 21 años en la máxima competición europea. Un logro destacado, que le coloca junto a nombres tan importantes como Haaland, Mbappé o Benzema.
Mientras el Real Madrid controlaba el juego con toques precisos y aceleraciones oportunas, el Nápoles se veía impotente en el robo y carecía de ideas para generar juego. Giovanni Simeone, controlado por el sólido Rüdiger, y Kvaratskhelia, neutralizado por un gran Carvajal, no lograban inquietar la defensa madridista, dependiendo de los centros hacia el segundo palo en busca de Di Lorenzo.

Tocaba descanso en el Bernabéu con victoria por 2-1. Ya en la segunda parte, la máxima amenaza del Nápoles, Víctor Oshimen, salió nada más rodar el balón. Por su parte, al Real Madrid le costó arrancar, que saltó al terreno de juego con el mismo once inicial. En el minuto 46’ tras un rechace en el que nada pudieron hacer Toni Kroos y Mendy, y que Zambo Anguissa remató para igualar el partido a 2-2.
Varias oportunidades tuvo Joselu para marcar y aumentar la ventaja blanca pero fue en el minuto 83’, cuando fue el momento del joven canterano Nico Paz en su primer partido con la camiseta blanca, que marcaba el tercer gol. Engañaba a la defensa y su cara reflejaba la felicidad por el tanto conseguido que hacia el 3-2 y se estrenaba marcando en Champions. Minutos después, Ancelotti hacia doble cambio, sacaba del terreno de juego a Mendy por Nacho, y a Rodrygo por Lucas Vázquez, unos cambios que movían más el juego.
Y como dicen, quien la sigue, la consigue, y es la definición exacta de la clase de jugador que es Joselu. En el minuto 90’, y demostrando parte del himno “hasta el final…”, Bellingham le ponía un pase increíble a Joselu, que tras varias oportunidades fallidas, en ésta no perdonaba y aprovechaba perfectamente para marcar el cuarto poniendo el 4-2 a favor de los blancos. Así acababa el encuentro con victoria blanca que siempre es candidato a esta competición europea. El Real Madrid ya está en octavos, ya está en su camino a su posible 15.