En un partido directo por la zona de abajo, el RCD Mallorca ganó 2-1 en el descuento en un partido donde aplicó más intensidad e incluso fútbol. De forma definitiva, el Rayo entra en crisis
A comer y a echarse la siesta. Esos pensaron mucho cuando vieron el primer tiempo del Mallorca-Rayo. Porque más allá de una ocasión clara de Isi Palazón, ambos equipos se tantearon sin darse golpes. Si algo desquició a los de Javier Aguirre, fue el arbitraje de Munuera Montero. Metralleta de amarillas para un encuentro que estaba siendo tranquilo. La única acción punible fue la tarjeta para Dani Rodríguez, que tuvo una acción fea (sin intención) con Isi. En lo que es al juego, los bermellones entraron con una línea de cinco. Nacho Vidal debutó y Vedat Muriqi respiró una titularidad que le hace volver a sentirse importante. Por su parte, el Rayo Vallecano presentó una alineación más ofensiva que en las últimas citas. Además, Abdul Mumin entró por el detrimento de Aridane Hernández.
A pesar de abandonar el doble lateral, Francisco y los suyos siguen ofreciendo una propuesta de juego que no casa con el perfil de los futbolistas que posee. En redes sociales, se podía ver la indignación de los aficionados rayistas, hartos del pelotazo. La noticia positiva fue un Óscar Valentín que estuvo excelso en la recuperación. Aportó e igualó la intensidad que suele ofrecer el Mallorca en el bloque medio.
Valentía
Aguirre notó el conservadurismo de su rival y cambió el planteamiento. Abdón Prats entró a la faena para que el RCD Mallorca pasará a un 4-4-2 donde ganó presencia en el último tercio de campo. Por ello, a los tres minutos la intención se convirtió en realidad. Antonio Sánchez finiquito una jugada colectiva tras un mal despeje hacia atrás de Óscar Valentín. Una vez más, la línea adelantada de la parcela trasera de los franjirrojos da otro dolor de cabeza. Con este escenario, la afición de Son Moix espoleó a los suyos, merecieron el segundo, pero se electrocutaron con un gol de Álvaro García a falta de 14 minutos del final. Duró poco la parálisis, pero lo pudo pagar caro. Al acto, el Rayo tuvo el 1-2 en sus botas. Sin dudas, fueron los mejores minutos, aunque todo se quedó en espejismo.
Descuento letal
Sobre la bocina, un balón parado de Dani Rodríguez, que empieza a ser la figura jugona del equipo de forma sobrada, envió un córner a la cabeza de Muriqi para desatar la locura en el 91. El pirata encontró el gol nuevamente tras unos tiempos difíciles tras la lesión. Precisamente, su último tanto con la elástica mallorquina fue en Vallecas en el partido de ida. Una victoria que son 3 puntos claves para un Mallorca que sueña con otra permanencia y una posible final de Copa del Rey. Tras las derrotas del Cádiz o el Celta, era clave sacar provecho de este duelo directo.
Mientras, el Rayo Vallecano, en una semana de polémica por la ubicación del posible nuevo estadio, se sigue desinflando en sensaciones, fútbol y capacidad de reacción. Real Madrid y Girona son los próximos rivales para complicar más la faena de un barco que no tiene capitán. Parece que la cita ante el Cádiz en tres jornadas será crucial para saber el destino del Rayo Vallecano de cara al final de temporada.
FICHA TÉCNICA:
RCD Mallorca: Rajkovic, Nacho Vidal (Abdón Prats min.46), Gio González, Raíllo, Nastasic, Jaume Costa (Toni Lato min.84), Antonio Sánchez, Omar Mascarell (Radonjic min.79), Sergi Darder (Manu Morlanes min.62), Dani Rodríguez y Muriqi.
Rayo Vallecano: Dimitriesvki, Balliu, Lejeune, Mumin, Espino (Pep Chavarría min.68) , Óscar Valentín, Pathé Ciss (Óscar Trejo min.62), Isi, Álvaro García, Kike Pérez (Unai López min .68) y Camello (Raúl de Tomás min.61).
Goles: 1-0 Antonio Sánchez (min. 48), 1-1 Álvaro García (min. 76) y 2-1 Muriqi (Min. 90+1).