Javi Hernández congela Vallecas

Un gol en el descuento evita que el Rayo gane un partido en el que estuvo interrumpido durante ocho minutos por una fuerte granizada. El conjunto de Mauricio Pellegrino se agarra a la permanencia a base de goles en el descuento, aunque el empate no sirve para mejorar sensaciones en ambas entidades

Como el cielo. Tarde de grises en Vallecas. La lluvia fue protagonista y apagó al Rayo Vallecano. Nadie se lo esperaba, después de como casi 2.000 rayistas rodearon el estadio por la mañana, a pesar de las condiciones meteorológicas, protestaron por el posible cambio de estadio. La cadena humana al mismo fue un éxito, pero el juego de los de Íñigo Pérez no. Rubén Sobrino y Robert Navarro supieron encontrar las debilidades de un Rayo que estuvo blanda por los costados. Un primer tiempo donde Maxi Gómez tuvo alguna oportunidad clara, pero Stole Dimitrievski apareció de forma excelsa. Si bien es cierto que Miguel Crespo y Óscar Trejo intentaron empujar a su equipo, el Cádiz dejó mejores sensaciones. Destacó por encima de todos Rominigue Koaumé. Uno de los jugadores que cambió el destino del Celta – Cádiz dio otra buena imagen para los intereses cadistas.

Lo que parece claro es que Chris Ramos y Gonzalo Escalante han perdido su sitio en el once ideal. También Iván Alejo, el mejor futbolista de la temporada para los de la Tacita de Plata. Por otro lado, en el tapete de juego se demostró porque ambos planteles son los menos goleadores de la categoría. Poco remate, pero también poca capacidad para crear ocasiones. También hay que decirlo, el temporal fue de locos e inesperado. Lluvia, viento, aire y hasta un granizo que paró el partido durante 8 minutos en la segunda mitad.

Gloria y pena

Tras el descanso, los dos equipos dieron un paso adelante. Rubén Sobrino y Raúl de Tomás tuvieron dos ocasiones clarísimas para romper el resultado gafas. Con mucha intensidad, el partido evolucionó nuevamente a la poca creación que se vio en los primeros 45 minutos. Pero señoras y señores, todo cambió tras el granizo. Alberola Rojas mandó a la caseta a los 22 protagonistas por las piedras que estaban cayendo sobre el recinto situado en la Avenida de la Albufera. A la reanudación de la interrupción, el Rayo se hizo con el balón y empezó poco a poco a embotellar a un Cádiz que no encontraba soluciones. Clave fue como cinco minutos antes; los jugadores franjirrojos calentaron sobre el césped para sentir el aliento de su público. El premio lo encontró en un córner en el minuto 89. Conan Ledesma no acertó en el despeje y Florian Lejeune marcó para lo que era prácticamente, firmar la permanencia. Por cierto, la temporada pasada también marcó al conjunto amarillo.

Aridane, en la foto

Pero si bien es cierto que todo estaba quedando en un marco épico, tardaba a su vez en sonar la flauta de la desgracia. Una vez más, Aridane se durmió en seguir junto a sus compañeros la línea del fuera de juego y Javi Hernández no perdonó para batir a Dimitrievski. Después del milagro ante el Celta, el Cádiz se agarra a la Primera División a base de los tiempos de descuento. El único vencedor del día fue una afición rayista que demostró una vez más porque el Estadio de Vallecas no se puede mover del barrio bajo ningún concepto, o eso dejaron en constancia durante el partido. Empate que no sirve a ninguno y se alarga la agonía para ambos.

FICHA TÉCNICA:

Rayo Vallecano: Dimitrievski, Espino, Aridane, Lejeune, Balliu, Óscar Valentín (Pathé Ciss, m.81), Miguel Crespo (Jorge de Frutos, min. 81), Álvaro García, Isi (Kike Pérez, min 97), Trejo (Unai López, m.56) y Raúl de Tomás (Falcao, m.81).

Cádiz: Ledesma, Javi Hernández, Víctor Chust, Meré, Iza Carcelén, Kouamé (Escalante, m.86), Alcaraz, Robert Navarro (Darwin Machís, m. 94), Rubén Sobrino (Iván Alejo, m.85), Juanmi (Chris Ramos, m.81)y Maxi Gómez (Sergi Guardiola, m.81).