En un vibrante encuentro en San Mamés, el Deportivo Alavés no logró sacar provecho a su dominio inicial frente al Athletic Club, cayendo 2-0 a pesar de haber mostrado un juego prometedor durante gran parte del partido.
Desde el pitido inicial, el Alavés tomó las riendas del juego, mostrando determinación y creando numerosas oportunidades de gol que mantenían a la defensa rival en constante alerta. Los aficionados albiazules palpaban la emoción de un gol inminente, anticipando con entusiasmo el merecido tanto que parecía estar al caer.
Sin embargo, el destino del partido cambió drásticamente cuando el Deportivo Alavés tuvo la oportunidad de ponerse en ventaja desde el punto penalti. En el minuto 30, Andoni Gorosabel ganó una falta en el área, concediendo al Alavés un penalti que parecía prometedor. Pero la suerte no estuvo del lado del equipo visitante, ya que Unai Simón, portero del Athletic, adivinó la intención de Luis Rioja y detuvo el disparo, manteniendo la portería a cero para su equipo.
Poco después, en el minuto 32, el Athletic encontró la ventaja con un gol de Gorka Guruzeta, tras una jugada rápida que siguió al penalti fallado por el Alavés. A pesar del dominio inicial del Alavés, este gol marcó un punto de inflexión en el partido.
El segundo gol del Athletic en el minuto 37, nuevamente de Guruzeta, complicó aún más las cosas para el Alavés, que luchó con tenacidad pero no logró remontar el marcador.
A pesar de la derrota, el Deportivo Alavés mostró un juego prometedor y competitivo, dejando claro que tiene el potencial para competir al más alto nivel. Sin embargo, deberá trabajar en la eficacia ofensiva y en la solidez defensiva para asegurar resultados positivos en los próximos encuentros.