Nada cambia en el equipo de Íñigo Pérez. En el primer test de la pretemporada, La Franja demostró varias caras. Sigue siendo un grupo comprometido, competitivo y que nunca se rinde. Aún con las equipaciones de la 22/23, la sequía continúa. Sí, los delanteros siguen sin mojar y los defensas son los goleadores. No, está vez no fue Florian Lejeune (tercer máximo goleador rayista por detrás de Álvaro García e Isi Palazón en la pasada campaña).
Pelayo Fernández y Marco de las Sias fueron los anotadores de un encuentro, a priori, difícil. El campeón de la Taça de Portugal, acostumbrado a jugar competiciones europeas, redondeaba su cartel con otra ventaja: para los lusos, era su séptimo partido de preparación. Para el Rayo, fue el primero.
En cuanto al juego, los de Íñigo comenzaron mejor. Marcaron a balón parado y pudieron ponerse 0-3 con dos ocasiones muy claras por parte de Raúl de Tomás y de Álvaro García. A partir de aquí, el Braga, comandado por un gran Ricardo Horta, dio la vuelta al partido antes del descanso en el Municipal. El capitán hizo el 2-1 y, anteriormente, Gabri Martínez, ex Girona y uno de los nuevos fichajes, fue quien puso el empate.
Gran estreno de los nuevos
Con cambios de dorsales destacados (Dani Cárdenas con el 1, Pacha Espino con el 22, Pathé Ciss al 6 y un RDT que se apropia del 9 de Falcao), el Rayo realizó 9 cambios al inicio de la segunda mitad. Debutó otro de los fichajes: Gerard Gumbau hizo acto de presencia y, por poco, casi se estrenó al igual que Pelayo. Lanzamiento a larguero. A destacar también Andrés Martín, que para ser una salida casi segura, jugó 73 minutos. Seguro que al Racing no le gustó esta noticia.
También hubo hueco para Etienne Eto’o. El hijo del mítico delantero camerunés dejó buenas sensaciones y ojito a su pretemporada. Si tiene el mismo impacto que esta noche, tiene opciones de formar parte del primer equipo. A falta de dos minutos, Marco de las Sias, que se ha recorrido las canteras del fútbol madrileño, anotó el tanto de la igualada definitiva.
Noche de notable para Pelayo, que demostró jerarquía, solvencia y su faceta con el gol. No tanto para Aridane Hernández, que siguió teniendo errores que tendrá que corregir si quiere optar a la titularidad. Por último, el siguiente reto será el sábado a las 20:30 ante el Vitoria Guimaraes para poner fin a la gira portuguesa antes de viajar a Inglaterra.