Sin prisa, pero sin pausa. En el Atlético de Madrid continuan trabajando en busca de reforzar una plantilla en la que se han producido hasta ocho salidas y, hasta el momento, tan solo una llegada. Solo Robin Le Normand ha reforzado el cuadro colchonero y, con tan solo tres semanas de margen hasta el debut en LaLiga, la directiva debe trabajar a marchas forzadas en busca de fichajes. Principalmente se trabaja en la incorporación de un delantero (tras la caída del fichaje de Dovbyk), un centrocampista y un defensa, sin descartar otras posibles incorporaciones.
Poniendo el foco en la medular, el objetivo prioritario del club madrileño era Mikel Merino. Sin embargo, el jugador de la Real Sociedad no ve clara la opción colchonera y parece que se va a acabar decantando por la oferta del Arsenal, que ha apostado fuerte y tiene todas las papeletas para llevarse la puja. Ante esto, la directiva del Atlético ha activado ya el «Plan B», también conocido como Conor Gallagher. Un centrocampista inglés de 24 años que milita en el Chelsea y que tiene las puertas abiertas este verano para abandonar el conjunto blue.
Tanto es así que incluso Fabrizio Romano ha adelantado en exclusiva que Atlético de Madrid y Chelsea ya se encuentran negociando el traspaso del futbolista. Una operación que estaría avanzando a buen ritmo y que se situaría cerca de los 35 millones de euros, pudiendo incrementarse al incluir las variables. Una cantidad considerable para un futbolista que termina contrato la temporada que viene, aunque es una cifra menor a su valoración de mercado según Transfermarkt que se establece en 50 millones de euros.

Trippier, un aliado colchonero
Resulta extraño ver a un futbolista inglés jugando en España, pues la adaptación a España no suele ser sencilla por las diferencias existentes entre ambas culturas. Sin embargo, esto que se podría considerar un obstáculo, se contrarresta con la ayuda de un exjugador del Atlético de Madrid que está echando una mano a su antiguo club. Kieran Trippier se ha convertido en un aliado rojiblanco y ha tratado de convencer a Gallagher de probar la experiencia española de la mano del Atlético de Madrid.
La buena experiencia del lateral inglés podría ser clave para convencer a su compañero de selección mientras los clubes trabajan en alcanzar un acuerdo positivo para todas las partes. Un fichaje que si se acaba produciendo le daría un salto de poder a la medular colchonera, ya que Gallagher es un jugador con un gran poderío físico capaz de abarcar varias zonas del campo. Además, en ese perfil box to box, el del Chelsea ha dado muestras de su capacidad de aportar en ataque (siete goles y nueve asistencias). Eso sí, su llegada supondría ocupar la tercera plaza extracomunitaria que tiene disponible el Atlético en estos momentos.
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