Los partidos de pretemporada avanzan, pero la vida sigue igual en el conjunto franjirrojo. Otro encuentro sin gol, con sensaciones defensivas preocupantes y una recreación futbolística que cada vez es más calcada a lo que se vio la pasada temporada. En comparación con las citas ante el Heerenveen o el Córdoba, la imagen global del equipo fue mejor, pero no alcanza ni es suficiente. Eso sí, Íñigo Pérez ya tiene perfilado su once titular para la primera jornada de Liga. En la portería, parece que Dani Cárdenas será el elegido. En la zaga, Aridane se cae por un Abdul Mumin que aporta más seguridad. A pesar de ser de los últimos en llegar, Adrián Embarba gana enteros para ocupar la banda derecha y que Isi Palazón sea el MCO para esta 24/25. Por otro lado, Iván Balliu arranca con más opciones que Andrei Ratiu en la banda derecha y RDT seguirá siendo el 9.
Ahora bien, el debate no está en las piezas. Íñigo Pérez ha probado casi todo en cuanto al uso de jugadores. Lo preocupante es seguir usando un estilo que no favorece el estilo de unos futbolistas que demandan más balón para poder destacar más. En lo que se refiere al análisis táctico, el Rayo Vallecano se está hundiendo en una orilla donde no hay alternativa de nado para salir del fondo marino en el que se encuentra. El 4-2-3-1 da la sensación de prolongar un yogurt caducado que aún se puede comer, pero con riesgo a que un día el mal estado se convierta en una realidad.
Novedad en la apariencia
Yendo al partido, se estrenó la nueva elástica. Con polémica durante toda la semana, los aficionados rayistas confirman sus malas vibraciones al verla puesta en directo. En el césped del Vitality Stadium, tampoco fue mejor el asunto. Tras un inicio con poca actividad, el Bournemouth de Andoni Iraola avisó en el minuto 17 con una gran ocasión en la primera parada de Cárdenas en el partido. Las malas noticias no tardaron en llegar en forma de lesión. Álvaro García se rompió y tuvo que ser sustituido al sobrepasar el ecuador de la primera parte. En su lugar, entró un Jorge de Frutos que fue de lo más llamativo en el Rayo Vallecano. Los golpes, como si de un combate desnivelado de boxeo perteneciente a los Juegos Olímpicos se tratase, siguieron llegando. Luis Sinisterra finalizó un gran contraataque para poner el 1-0 en el marcador. A partir de aquí, ese último cuarto de hora del primer tiempo fueron los peores minutos de los chicos de Íñigo Pérez, que pudieron recibir dos goles más antes del descanso.
En el arranque del segundo envite, de Frutos revolucionó el choque. Gran participación en el juego rayista, que tuvo dos ocasiones claras para igualar el resultado. Lamentablemente, ahí murió el partido. Con los Cherries en modo conformista y con un Rayo sin capacidad de reacción, el conjunto madrileño sumó su tercera derrota de la pretemporada y la acumulación de cinco partidos sin ganar. La última prueba será ante el Wolverhampton, antes de abrir la campaña 24/25 en Anoeta ante la Real Sociedad.
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