Nueva temporada, mismos problemas

Han pasado cerca de tres meses desde que terminó la pasada temporada y tan solo se ha disputado un partido oficial del nuevo curso, pero ha sido suficiente para que los problemas del Atlético de Madrid vuelvan a la palestra. Anoche, en el debut liguero ante el Villarreal, los fantasmas del pasado hicieron acto de presencia en La Cerámica y volvieron a evidenciar la verdadera urgencia a solventar en lo que resta de mercado de fichajes para los colchoneros. Porque sí, más allá de la profunda renovación ofensiva y la amplia salida de jugadores, el agujero negro del Atleti está en la defensa y queda mucho por hacer para tapar ese boquete.

Esa fragilidad defensiva que lastró los éxitos el curso pasado volvió a ser protagonista, para mal, del comienzo del nuevo Atlético. En una defensa formada por Azpilicueta, Witsel, Le Normand y Reinildo, acompañada de las ayudas en los carriles de Llorente y Lino, se vieron las costuras a las primeras de cambio. Un epicentro del foco al que también se sumó Oblak, que dio muestras de su falta de solvencia en el juego aéreo y la inseguridad que transmite a sus compañeros en ese tipo de situaciones. En definitiva, un coctel cargado de peligro para un Simeone que se enfrenta a los problemas del pasado.

Y es que tras las salidas de Savic, Hermoso, Söyüncü, Gabriel Paulista y el más que probable adiós de Javi Galán y Santiago Mouriño, a la zaga rojiblanca solo ha llegado un refuerzo: Robin Le Normand. Un balance que deja la defensa colchonera en mínimos, solo formada por seis integrantes: Giménez (con el elevado número de partidos que se pierde por lesión), Witsel (35 años y con la incertidumbre de si será capaz de mantener el nivel de la temporada pasada), Azpilicueta (cumple 35 años en unos días), Reinildo (no cuenta con la confianza de Simeone tras la grave lesión que sufrió), Nahuel Molina (su nivel preocupa cada vez más) y Le Normand, el fichaje de este verano.

Urge salir al mercado

Ante esta situación, en la entidad madrileña tienen claro que el último esfuerzo a acometer en un verano de mucho movimiento debe centrarse en la parcela defensiva. El equipo lo pide a gritos y Simeone ha sido claro en sus demandas para tener a su disposición a una plantilla equilibrada y verdaderamente competitiva. El favorito del argentino es Dávid Hancko, un central zurdo que es clave para sustituir la vacante que ha dejado Mario Hermoso y que liberaría a Le Normand de tener que jugar en una posición en la que no brilla de igual manera.

Las negociaciones con el Feyenoord no son sencillas, así se ha podido comprobar a lo largo del verano, pero el Atlético hará un esfuerzo por llegar a un acuerdo. Además, los ingresos de la venta de Joao Félix al Chelsea dan un margen hábil para que el club siga trabajando en fichajes, teniendo en cuenta a su vez que el tema salidas no está cerrado y que nombres como el de Samu Omorodion o el de Rodrigo Riquelme pueden ser protagonistas. En definitiva, la partida de ajedrez del Atlético en el mercado de fichajes no ha llegado a su fin y todavía restan varias piezas por moverse hasta llegar al jaque mate definitivo.

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