Racing de Ferrol 1-4 Albacete Balompié: El mejor final para una mala racha albacetista

Habló mucho de dinámicas Alberto González en su comparecencia previa al duelo que enfrentaba a su Albacete Balompié contra el Racing de Ferrol en A Malata, y en concreto de la negativa de tres derrotas consecutivas en la que vivían atrapados sus pupilos ha vivido su mejor final posible: una goleada a domicilio (1-4). El tiempo dirá si supone un punto de inflexión en la temporada, pero lo cierto es que la actuación de los jugadores albacetistas ha contrastado totalmente con la falta de ideas y de energía que mostraron ante Málaga, Eibar y Mirandés. Quizá tuviera que ver los cinco cambios que introdujo González en el once, empezando por la portería, o que el rival exhibió una mandíbula más de cristal de los que había tenido en frente hasta hoy.

Sea como fuere, durante los primeros 45 minutos hubo ocasiones y acercamientos por parte de los dos contendientes que no hacía presagiar un resultado abultado a favor de uno u otro. El centro del campo parecía un espectador más del verde de A Malata. Las defensas parecían nerviosas como consecuencia de las dinámicas – valga la redundancia – que atravesaban. Dorrio daba dolores de cabeza constantemente a Juan María Alcedo por la derecha y a la defensa del Albacete en general, mientras que los hombres de la medular y del ataque visitante encontraban vías hacia la meta de Jesús Ruiz en cuanto hilaban una sucesión de pases relativamente prolongada.

Dorrio dispara ante Jon García y Ávaro Rodríguez en una aproximación del Racing de Ferrol en la primera parte (foto vía www.laliga.com)

Una recta final que marcó el camino

El Albacete se fue a los vestuarios sin el premio que, quizá, mereció por las ocasiones que disfrutó en los últimos compases del primer acto. Principalmente por medio de Fidel, que culminó una jugada muy elaborada con un chut alto ante los pitos de la afición local a menos de cinco minutos del descanso y que gozó de otra a bocajarro ante Ruiz que el arquero local desvió a córner.

A los dos minutos de la reanudación se desató la tormenta goleadora cuando Juanma García cabeceó a la red un buen envío de Agus Medina desde la derecha, merced a una galopada de las suyas con las que saca a relucir su despliegue físico. Pudo ampliar la ventaja Quiles en una contra de no ser por la intervención del meta local, pero Puric en el 71 agradeció un balón exquisito de Señé en una falta lateral, se impuso a Jon García en el salto – que volvía a su antigua casa – haciendo valer sus 20 centímetros de ventaja y puso la igualada. Fue una mera anécdota de lo ocurrido en la segunda mitad.

El Albacete descorchó el champán

No se amilanó el Albacete ante el golpe, todo lo contrario. Higinio devolvió la ventaja a los manchegos tras resolver con maestría en un mano a mano ante Ruiz previo autopase ante un defensor, después pusieron su sello en el descuento los dos laterales que estaban por aquel entonces en el campo: Javi Rueda primero marcando por bajo y Alcedo. Un gol balsámico para el «3» albacetista tras los problemas que tuvo que sufrir en la primera parte. Aunque lo cierto es que tuvo una terapia perfecta con la profundidad que pudo disfrutar tras el paso por los vestuarios.

El Racing de Ferrol tendrá que mejorar mucho si quiere permanecer otra temporada más en LaLiga Hypermotion. Por su parte, el Albacete Balompié ya puede ver la vida de otra forma tras el festín de hoy.

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