OGC Niza 1-1 Real Sociedad: Los txuri urdin rescatan un punto en su visita a Francia

Nuevo formato y nuevos inicios para la Real, por la primera fecha de la UEFA Europa League el conjunto donostiarra visitó al OGC Niza con la intención de iniciar el torneo internacional de la mejor manera posible, el equipo francés venía de golear al Saint-Etienne por la Ligue 1 y las especulaciones desde San Sebastián daban lugar a las dudas por el bajo rendimiento que se ha mostrado hasta el momento en La Liga EA Sports.

Primer tiempo

El partido empezaba con un lindo tifo presentado por la afición francesa presente en el Allianz Rivera y con el himno de la UEFA Europa League que ponía un marco perfecto para una noche del segundo torneo en importancia a nivel de clubes de Europa, con los pirmeros minutos en juego el que se atrevía de buenas a primeras era el local que con una arremetida que condujo Guessand hasta el área dejó el balón para su compañero Moukoko que con un disparo cruzado buscó el poste mas lejano defendido por Álex Remiro pero su intento se marchaba ligeramente desviado, primer aviso para la Real.

La postura de inicio que propuso Imanol Alguacil ya hablaba de las intenciones del equipo txuri urdin para la primera parte: Una nutrida defensa de 5 con 3 centrales y dos laterales que permitieran consolidar una sólida defensa para salir en contraataques veloces con Brais Méndez e intentar encontrar a Mikel Oyarzabal, el balón era casi completamente por completo de «las águilas» que tenían una línea de fondo de tres defensas y dejaba descubierta la retaguardia dejando abierta la oportunidad para los habilidosos delanteros donostiarras y el poderío del medio campo. La presión alta del equipo local permitía un mayor control del balón y de las acciones, sin embargo, se estrellaban en los primeros minutos ante la sólida defensa propuesta por la visita que no cedía terreno y obligaba a lejanos intentos que terminaba atajando sin problemas el guardameta de la selección española de fútbol.

El riesgo que corrían los locales era atacar con tantas personas y dejar tan descubierta la defensa de solo tres hombres que había propuesto Franck Haise en su 11 inicial, dichos riesgos eran aprovechados por el medio campo de la Real Sociedad que hacía una labor excepcional cuando tenía los espacios necesarios para atacar aprovechando cada jugada de peligro de muy buena manera para finalizar las jugadas alejadas de su arco, a los 15′ en un robo desde campo propio aparecía la carrera de Barrenetxea que pisa el área por el costado deja el pase atrás, para la llegada de Pablo Marín que remató de primera pero el balón se fue desviado, dos minutos después en otra acción de recuperación del balón llegó el premio para los txuri urdin, pues en una excelente conducción de Brais Méndez logró asistir a Ander Barrenetxea que se perfiló muy bien para sacar un potente derechazo al ángulo superior derecho poniendo el primer gol de la noche.

El gol puso alerta máxima en el equipo francés que tenía que salir más aún para encontrar rápidamente el empate, por su parte, el plan a la Real le salía a la perfección que no cambiaba su postura y ahora podía jugar de manera más inteligente para administrar el resultado y jugar con la ventaja en el marcador para poder convertir en una oportunidad que seguramente aparecería ante la necesidad del rival y de los espacios que aparecerían tarde o temprano. Poco a poco las impresiciones empezaron a aprecer en el equipo local, de esto se aprovechó el equipo de San Sebastián para mantener muy alejados los intentos de «las águilas» que no terminaban de alzar el vuelo en su estadio y con faltas y reclamos empezaban a aparecer las amonestaciones para sus jugadores como Rosario y Guessand.

Durante los últimos minutos del primer tiempo parecía que cada acción del conjunto donostiarra que llegaba al área rival podía terminar en gol pues el peligro con el que llegaban los jugadores txuri urdin se plasmaba en el campo de juego con acciones muy claras de cara al arco rival, el mejor del primer tiempo para los vascos, Ander Barrenetxea, jugaba un partido excepcional, a los 36′ condujo por banda derecha y en un pase casi de memoria habilitó a Mikel Oyarzabal que quedó completamente de cara al arco pero un cierre providencial de última hora del defensor francés para evitar el segundo gol del encuentro a favor de la visita. Cuando parecía que todo se iba en favor de la visita, en el último minuto de la primera parte llegó un gol totalmente fuera de contexto tras un flojo despeje de Aihen Muñoz en defensa de la Real que le quedó a Rosario y este sacó un potente remate por bajo que sorprendió a Álex Remiro y ponía el partido 1-1 en la última jugada del primer tiempo.

Segundo tiempo

Sin cambios en el inicio del segundo tiempo empezaba la parte definitiva del partido que prometía traer emociones con ambos equipos buscando la victoria en su debut en la UEFA Europa League, los franceses empezaban nuevamente con la posesión del balón y nuevamente se palteaba la nutrida defensa de la Real en el fondo de manera sólida para contraatacar ante cualquier espacio que dejasen sus rivales. Buscaban una nueva alternativa ante la postura defensiva de la visita «las águilas»: El balón parado, en un tiro de esquina en el que no sucedía nada llegaba una situación recurrente en los últimos partidos para los donostiarras, penal en contra tras un agarrón en el área que Jon Pacheco le hizo a Dante, la acción se revisó en el VAR y se confirmó la acción para los locales, sin embargo, Guessand se hizo cargo del disparo pero Álex Remiro de manera magistal atajó el disparo por bajo que sacó el delantero francés, se mantenía el empate 1-1.

La atajada del penal hizo a Imanol Alguacil mover su banco viendo que era momento de modificar un poco el esquema, salían Ander Barrenetxea, Álvaro Odriozola y Aihen Muñoz por Sheraldo Becker, Jon Aramburu y Javi López, el dominio del Niza era muy notable, la Real se replegaba muy cerca de su arco y esto solo envalentonaba a los locales para ir a buscar el partido que se empezaba a inclinar a su favor con el aliento de sus aficionados y con poca reacción de parte de la visita que ya no era el mismo equipo del primer tiempo que lograba hilar poderosos contraataques que los preocupasen en defensa. Franck Haise movía su banco: Salían Tom Louchet y Badrenine Bouanani por Tanguy Ndombelé y Sofiane Diop para refrescar el ataque de «las águilas».

Imanol buscaba mejorar la situación en el medio campo dándole paso a Luka Sucic por Brais Méndez y con ello buscar mayor influencia en el área del ataque donde ya no estaba siendo clara la Real, que seguía defendiendo y concendiendo tiros libres y tiros de esquina a sus rivales en acciones muy cerca de su propio arco, parecía aguantar el resultado el equipo txuri urdin que no mejoraba su postura en el campo de juego. Volvía a modificar el ataque el técnico de los locales con el ingreso de Victor Orakpo por Youssoufa Moukoko, mostrando las claras intenciones de querer buscar el partido en el que se veían muy superiores desde el inicio del segundo tiempo y que solo por Álex Remiro y algunas intervenciones en defensa no iban ganando.

La última carta que se jugaba el entrenador oriotarra era Orri Óskarsson por Mikel Oyarzabal, jugándose nuevamente el todo por el todo en un partido que ingresaba en los últimos 10′ más el tiempo añadido por el árbitro, seguía en modo muy defensivo el conjunto donostiarra esperando un contraataque que en ningún momento se le dió en el segundo tiempo y que solo puso en riesgo el resultado que por ahora derivaba en un sufrido empate, pero que por lo menos no significaba iniciar el andar por Europa sin puntos. Por parte de los locales no aparecía la claridad suficiente como para culminar las jugadas en ocasiones claras de gol. La poca contundencia de «las águilas» le daban unos minutos de respiro a la visita que encontró una jugada para finalizar en el área de sus rivales con una incursión muy luchada con lo defensas de Sheraldo Becker que al triunfar en el duelo lanzó el centro que le llegó a Jon Aramburu pero su intento se marchó desviado.

Respondió el Niza con Youssouf Ndayishimiye con un disparo lejano desde fuera del área que se marchó por encima de la portería, se animaba de nuevo el equipo local que arremetía en búsqueda de la victoria ante su gente, mientras tanto se cumplían los 90′ reglamentarios y se agregaban 5 minutos más, el partido llegaba a su fin y todo se encaminaba irremediablemente a un empate con el que los de San Sebastián parecían sentirse satisfechos desde que Remiro evitó el 2-1 cuando atajó el penal. Los minutos de adición transcurrieron con una mayor posesión para «las águilas» pero sin efecto en el área de la Real y al final del encuentro se decretó un empate que rescata el equipo vasco y se lleva a casa de manera muy sufrida.

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