Crónica | Burgos CF 0-1 CD Mirandés: Hugo Rincón da el golpe en el derbi burgalés

Todos los partidos tienen protagonistas, y lo habitual es que sean los jugadores. Sin embargo, en el derbi burgalés no ha sido así. Las aficiones de ambos equipos se adueñaron del protagonismo en un encuentro plagado de imprecisiones. La defensa del Mirandés, sólida e impenetrable, resistió con temple los envites del Burgos, que, a pesar de sus intentos, mostró una falta de precisión alarmante en la zona ofensiva. El gran ambiente en El Plantío ha sido mérito de la hinchada, pero los tres puntos viajaron a Miranda. Hugo Rincón, con frialdad, supo aprovechar una ocasión para darle la victoria a los rojillos, quienes se afianzan en zona de play-off, dejando al Burgos fuera de ella tras una actuación ofensiva decepcionante.

El partido arrancó con un Mirandés más incisivo, que ya en los primeros compases del encuentro puso a prueba a Cantero con dos oportunidades claras, una de Alberto Reina y otra de Panichelli, que sirvieron como aviso temprano. El Burgos, más cauteloso, tardó en reaccionar y su primer acercamiento peligroso no llegó hasta el minuto doce, cuando Íñigo Córdoba envió un centro que estuvo cerca de rematar Fer Niño, pero la defensa rojilla mandó el balón a córner. A partir de ahí, los locales fueron ganando terreno, aunque las ocasiones claras escaseaban.

El Mirandés, fiel a su estilo, replegó filas y esperó sus oportunidades al contragolpe. El guión del partido fue cambiando a medida que avanzaban los minutos, con un Burgos más dominante en la posesión, pero incapaz de generar peligro real. Íñigo Córdoba tuvo las dos oportunidades más claras de la tarde para los blanquinegros, pero sus controles fallidos, cuando se encontraba en posición ventajosa dentro del área, frustraron cualquier posibilidad de gol. El equipo de Bolo notó especialmente las ausencias de Sancris y Kevin Appin, ovacionado por la afición debido a su baja de larga duración, lo que dejó un vacío en la construcción de juego y en la capacidad para llegar con claridad al área rival.

En la segunda parte, el partido mantuvo la misma tónica. Los blanquinegros acumulaban llegadas, pero el Mirandés, con una defensa férrea, se atrincheraba cerca de su portero Raúl Fernández. Atienza lo intentó con un disparo lejano desde fuera del área que obligó al guardameta rojillo a realizar la parada de la tarde.

Cuando el empate parecía inevitable, llegó el mazazo final. En el minuto 81, una jugada mal defendida por el Burgos terminó con el balón suelto dentro del área, y Hugo Rincón no perdonó, fusilando a Cantero para poner el 0-1 en el marcador. El gol cayó como un jarro de agua fría en El Plantío, donde los blanquinegros, con más corazón que cabeza, lo intentaron hasta el final, sin encontrar el premio. En los últimos minutos, se pidió penalti por una posible mano de Tachi dentro del área, pero ni el árbitro ni el VAR consideraron señalarlo.

El derbi cayó, por primera vez desde el regreso del Burgos al fútbol profesional, del lado del equipo visitante. Los jabatos suman su primera victoria a domicilio de la temporada y se afianzan en la zona alta de la tabla, mientras que los de Bolo, tras sumar solo un punto en los últimos tres partidos, quedan fuera de los puestos de playoff, obligados a mejorar en una fase crucial del campeonato.

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