Los dos equipos trataron de llevar la iniciativa en el momento del comienzo, siendo los amarillos algo superiores llegando a adelantarse en el marcador con un tanto de Alberto Moreno, y a partir de ahí se sucedieron las acciones comprometidas para ambos bandos, saliendo al final de la segunda parte vencedor el Celta.
El canterano del equipo local Damián Rodríguez fue la sorpresa de Giráldez en una alineación a la que retornó, entre otros, el lateral derecho Javi Manquillo. El Villarreal, por su parte, no se guardó nada y presentó en Balaídos su alineación más reconocida, pese a no poder contar con Gerard Moreno por lesión.
Celta y Villarreal se midieron en territorio celeste en la primera de las cinco finales que ha de afrontar el cuadro olívico en su pelea por la salvación, llegando los amarillos en un buen momento de forma tras derrotar a Rayo Vallecano y Almería en sus dos últimos partidos, pero Balaídos no es un escenario fácil para muchos equipos y hoy ha quedado demostrado. Porque el Celta se ha impuesto por 3 goles a 2 en un partido que tuvo muchísima irregularidad y constantes intercambios de golpes. A todo esto hay que añadir el clima que hubo en Galicia, lo cual hizo que el campo en muchas fases del encuentro estuviera mojado y con ello el balón corría con más velocidad. Pese a todo, el equipo vigués no se ha rendido y ha conseguido tres puntos vitales en su pelea por la salvación, teniendo ya 8 de ventaja respecto a un Cádiz que ha caído por 3-0 en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid.
Para este partido, los gallegos acometieron varias rotaciones en su once inicial, formando una defensa de tres con un único central puro (Starfelt) y un lateral derecho y un pivote reconvertidos (Manquillo y Jailson) desplazando al banquillo tanto a Unai Nuñez como a Carlos Domínguez. Mingueza actuó en el costado derecho, y en el centro del campo el técnico porriñés sorprendió dando cabida en la formación a Damián Rodríguez, uno de los que había sido y todavía es pilar de »su» Celta Fortuna. El resto del once, lo esperado, con Hugo Álvarez, Fran Beltrán, Iago Aspas, Larsen (que volvía de sanción tras perderse el partido contra el Alavés) y la esperada titularidad de Williot Swedberg tras quedarse Bamba fuera de la convocatoria por decisión técnica (queda claro asimismo que el sueco le ganó definitivamente el puesto).
Por su parte, el Villarreal se presentó en Vigo con su alineación más reconocible, a pesar de que Gerard Moreno era baja por lesión. El danés Jorgensen bajo palos, una defensa conformada por Kiko Femenía, Albiol, Yerson Mosquera y Alberto Moreno, en el medio Parejo junto a Santi Comesaña, Baena e Ilias Akhomach como extremos, y como referencias de ataque, el portugués Gonçalo Guedes se hizo con la plaza del »7» como acompañante del noruego Sorloth. En el banquillo solo se quedaba Morales de única alternativa ofensiva.
Primera parte, cuanto menos, igualada
Los primeros minutos fueron de máxima igualdad entre ambos conjuntos, teniendo Iago Aspas una oportunidad clara en el minuto 3 en la que se quedó solo ante la portería amarilla, e incomprensiblemente la mandó fuera. Antes ya había tenido una Sorloth para conseguir el primer gol, pero Starfelt llegó para negárselo. La defensa de Marcelino parecía tener controlado a Larsen, no dejándole intervenir en los metros clave, y el primer gol del Villarreal llega en una acción del marroquí ex del Barça Ilias Akhomach por su costado, en la que busca centrar, no encuentra sitio, tira con la zurda e intercepta la zaga. En el intento posterior, entre Comesaña y Parejo se la cedieron a un Alberto Moreno que entraba en el área por la izquierda para que este disparase sorprendiendo a toda la defensa y colocando con un golazo el primero de la tarde en Balaídos, en la primera llegada clara del equipo de La Cerámica.
Pero unos minutos después, todo se torcería. O esa era la sensación. Porque Santi Comesaña fue al bulto a hacer una dura entrada sobre el sueco Williot Swedberg, quedándose el »19» dolorido en el césped durante unos minutos. Soto Grado solo le mostró la amarilla al ex del Rayo, pero la dureza de la entrada hizo pensar a muchos que podía haberle sacado la tarjeta roja. El juego tardaba en reanudarse, hasta que Del Cerro Grande avisó al árbitro principal de que fuera a ver la acción al monitor porque creía que era merecedora de expulsión. Y tras revisarla, Comesaña abandonó el partido expulsado dejando a su equipo con diez. Y cuatro minutos más tarde, ya sin el gallego en el campo, Baena derribó a Iago Aspas dentro del área y el colegiado no dudó al señalar penalti a favor del Celta. El de Moaña cogió el balón, tiró la pena máxima y el esférico se introdujo en la portería de Jorgensen, yéndose el portero a la derecha y el balón al medio de la portería.
Podía dar la sensación de que el Villarreal estaba totalmente fuera del partido tras la expulsión y el penalti transformado por Aspas, pero tendrían un tiro de Baena flojo que se fue a las manos de Guaita. El Celta dispondría de un tiro al palo tras jugada individual, así como pidió penalti de Mosquera sobre Larsen y el árbitro no lo vio. Manquillo recibió amarilla por entrar a Guedes por detrás, así como posteriormente Damián. El cuadro amarillo parecía sobreponerse de gran manera a la expulsión, pese a un lío con el balón de Mosquera que por fortuna para ellos Larsen no convirtió en gol. El noruego dispondría de una acción más que clara para anotar el 2-1, tras recibir en el área pequeña un centro desde la banda derecha y cuando el balón coge portería, Jorgensen saca una mano espectacular para evitar lo que era un gol cantado de los de Giráldez. Ocasión clamorosa del »18» del Celta.
El estadio reclamó penalti en una acción de Alberto Moreno pero al final resultó que la pelota rebotó en su pecho. Y en la acción posterior, Damián colgó un balón al área desde el perfil derecho, siendo ese balón rematado de cabeza por Strand Larsen para colocar el 2-1 en el electrónico de Balaídos después de varios intentos fallidos y no faltar a su cita con el gol ante los »groguets». Tras esto el Celta pareció controlar más el partido, y al cumplirse los cuatro minutos descontados por el árbitro, señaló el camino de los vestuarios.
El Celta inicia algo superior la segunda parte
Para la segunda mitad Marcelino modificó su defensa quitando al central que había sido de los más activos en la primera parte, Mosquera, y metiendo a Jorge Cuenca. En el Celta, Luca de la Torre entró por el titular por primera vez, Damián, y Ristic sustituyó a Manquillo. Nada más volver, un centro desde el costado derecho fue rematado por el escandinavo y el esférico rebotó en el palo. Posteriormente, Hugo Álvarez recibió un pase filtrado en zonas interiores, realizó un disparo cruzado y el portero del Villarreal tuvo que lucirse para despejar el balón a córner. En el minuto 56 entraron Coquelin y Pedraza por Ilias Akhomach (muy incisivo por su banda cuando le tocó intervenir) y Alberto Moreno, el autor del 0-1 en clave amarilla.
El cuadro vigués volvió a estrellar un balón en el palo, esta vez por medio de Luca de la Torre, en una buena acción de Williot desde la derecha. El propio 19 recibiría una tarjeta amarilla por cortar una jugada de Pedraza y sería cambiado por el argentino Franco Cervi. Tras la sustitución, el Celta pidió una falta en el medio del campo, Soto Grado no la pitó, Sorloth hizo una gran acción individual en la que involuntariamente dejó solo a Guedes, este recibió el balón y tras unos segundos lo reventó contra la meta celeste. El equipo de Giráldez estaba siendo mejor que su rival y recibió el mazazo del tanto del empate.
Asimismo dispondrían de dos ocasiones que se irían altas, en un lapso de tiempo que el Villarreal hizo dos cambios, uno en el 73 y otro en el 78, siendo Parejo y Guedes los hombres sustituidos, para que ingresasen en el campo tanto Capoue como José Luis Morales. Mingueza tuvo otro tiro del estilo pero también se marchó alto, y en el minuto 80 llegaron los dos últimos cambios del Celta haciendo una declaración de intenciones de querer ir a por el partido, ya que Carles Pérez y Douvikas ingresaron en el campo por Hugo Álvarez y Fran Beltrán. Esto significaba que el griego formaría delantera con Larsen, Aspas se iría a la zona de creación y Carles Pérez ocuparía el sitio de Mingueza en el carril, yéndose el canterano del Barça a la zona de mediocampistas, un puesto que no le era para nada desconocido ya que Benítez le avanzó ahí en muchos duelos.
Dos minutos después, Iago Aspas puso un centro desde la izquierda al área, siendo este rematado por Douvikas, el recién ingresado, para poner el 3-2 en el marcador y desatar la locura absoluta en Balaídos ya que ese gol significaba media permanencia para los de Giráldez. Todo esto tras un remate forzado previo de Larsen en una jugada anterior. Sorloth la tuvo después para igualar, pero se fue desviada, y una contra entre las tres bestias de arriba del Celta no fue por nada rematada por el noruego Larsen. Carles Pérez tendría una última ocasión, floja, a las manos de Jorgensen, y con esto, tras otros 4 minutos de descuento, el partido finalizaría, habiendo resultado una gran batalla disputada en el campo del Celta de la que los gallegos salieron victoriosos sellando media permanencia. El Villarreal, por su parte, tiene más complicado todavía si cabe entrar en Europa la próxima temporada. Por parte del Celta, es de destacar la actuación de los siguientes jugadores: Iago Aspas, Larsen, Douvikas, Mingueza, Williot y Hugo Álvarez, mientras que en el Villarreal el constante desequilibrio de Ilias Akhomach por su perfil (hasta que fue cambiado), el formidable poderío físico de Sorloth (se hizo notar en muchas acciones del partido), la calma que siempre aporta al juego Dani Parejo, la velocidad de Guedes y el zarpazo de Alberto Moreno hacen que estos jugadores sean los que más hayan destacado en el duelo.
La próxima jornada del Celta de Vigo será en el Civitas Metropolitano, ante el Atlético de Madrid, el domingo 12 de mayo a las 16:15, mientras que el Villarreal, por su parte, recibirá al Sevilla en La Cerámica el sábado 11 en la misma franja horaria.
Ficha y alineaciones del partido
Celta de Vigo: Guaita; Manquillo (Ristic, 45′), Starfelt, Jailson; Damián Rodríguez (Luca de la Torre, 45′), Fran Beltrán (Carles Pérez, 80′); Hugo Álvarez (Douvikas, 80′), Swedberg (Cervi, 65′), Iago Aspas, Mingueza; y Larsen.
Villarreal: Filip Jorgensen; Kiko Femenía, Albiol, Mosquera (Jorge Cuenca, 45′), Alberto Moreno (Pedraza, 56′); Santi Comesaña, Parejo (Capoue, 79′), Álex Baena, Ilias Akhomach (Coquelin, 56′); Gonçalo Guedes (José Luis Morales, 74′) y Sorloth.
Árbitro: Soto Grado. Amonestó a Manquillo por una entrada por detrás a Guedes en el centro del campo, a Damián por un codazo a Álex Baena, a Williot Swedberg por frenar un contragolpe agarrando a un contrario y a Douvikas por bracear en un forcejeo. Expulsó vía VAR a Santi Comesaña por una durísima entrada sobre Williot a la que fue con la plancha arriba casi a la altura de su rodilla.
VAR: Del Cerro Grande.
Estadio: Abanca Balaídos.
Público: 19.548 espectadores presentes en las gradas del estadio.