Se termina el sueño europeo para un Real Madrid que cae por cero goles a uno ante un Paris FC que vuelve a ganar a las merengues.
El Real Madrid se volvía a ver las cara con el conjunto parisino en esta cuarta jornada de la Women’s Champions League tras el encuentro de ida que resultó favorable para el equipo francés. Las jugadoras blancas, que tras la derrota veían como sus esperanzas de pasar a los cuartos de la competición se iban haciendo cada vez más pequeñas, llegaban al Di Stéfano para demostrar a su afición que son capaces de dar la vuelta a esta mala racha por la que están pasando. El gran señalado sin duda en este partido sería el técnico merengue, Alberto Toril que a pesar de tener el apoyo de la directiva y de las jugadoras ve como la afición madridista está cada vez más descontenta con el nivel del equipo.
El equipo francés comenzaba el partido con un planteamiento similar al de la ida, Intentando obstaculizar la salida del balón de las blancas y ejerciendo una gran presión para ahogar a su rival. Sin embargo en frente no tenía a un rival cualquiera, sino que estaba un Real Madrid que quería aprender de los errores pasados y que comenzaba a crear las primeras ocasiones del encuentro que por poco acabaron dentro de la portería de Nnadozie. La más clara la tuvo la española Olga Carmona, que estrellaba el balón en el larguero tras un buen zurdazo.
El Real Madrid dominó al equipo parisino durante la primera parte, buscando con insistencia la portería rival, pero ponerse por delante en el marcador no sería tarea fácil. Ambos equipos se marchaban al vestuario con un empate que para el Real Madrid le sabía a poco. Las ocasiones llegaban pero sus disparos se veían repelidos por una muy buena actuación de la portera rival.
Daba comienzo la segunda mitad del encuentro con un París FC atrevido y enérgico dispuesto a aprovechar las ocasiones que llegasen. Ante esta actitud, Toril daba entrada a algunos refuerzos importantes como Linda Caicedo, Feller y Toletti, que volvían a pisar el verde tras sus lesiones para ayudar al equipo a seguir manteniéndose en la competición europea.
A pesar de los cambios, el empate seguía en el marcador y los nervios se apoderaban de las jugadoras blancas. Estos nervios fueron el causante de que en el 79′ la jugadora Maite Oroz cometiese un penalti que ponía patas arriba el encuentro. Thiney fue la encargada de convertir el penalti poniendo el uno a cero en el marcador, resultado que dejaba a las de Toril fuera de la competición.
A pesar de las intentonas del Real Madrid, las jugadoras no consiguieron darle la vuelta al marcador y el Paris salió del Di Stéfano con los tres puntos en el bolsillo. Un partido protagonizado por la desesperación de un equipo que ve como su juego no es suficiente como para estar en los cuartos de final de una competición como la Champions League.
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