En el derbi vasco jugado en Mendizorroza, un solitario gol de Jon Pacheco amarró los 3 puntos para la Real, que sigue mirando a Europa. El ‘Glorioso’ saltó al campo con una camiseta especial que conmemoró los 600 partidos de los babazorros en la máxima categoría del fútbol español. Preocupación en la Real por Take Kubo, que se marchó lesionado.
Mucha fiesta en las gradas de Mendizorroza, gran tarde de fútbol. En el Alavés, muchos reencuentros con la Real como ex-equipo: Guevara, Sola, Gorosabel, Alkain o Guridi se vieron las caras con su antiguo equipo. El granizo también se convirtió en un invitado inesperado en una primera parte en la que cuando este se convirtió en agua, dejó el césped de Mendizorroza casi impracticable. Al filo del descanso, en el minuto 44, Kubo tras un mal gesto en el que sintió dolor en el gemelo se marchó lesionado. Estaremos pendientes del alcance de la dolencia del habilidoso futbolista japonés.
En la segunda parte llegó el gol realista de la mano de Jon Pacheco. El defensa adelantó a su equipo tras un cabezazo en una jugada en la que el Alavés pidió falta. Ni el árbitro en el campo ni el VAR consideraron anular el gol. Y de ahí hasta el final pasó poco. El Alavés lo intentó, pero sin éxito pues la Real supo gestionar muy bien su ventaja.
Los txuri-urdin se quedan sextos con 49 puntos, 7 puntos más que el Betis y 6 por detrás del Atlético de Madrid. Por su parte los babazorros se quedan con 32 puntos, 7 por encima del descenso. El ‘Glorioso’ debería tener pocos problemas para salvar la categoría pero que no se despisten.