Las noches de copa en San Mamés tienen algo mágico. Y el Barça puede dar fé de ello,ya que son tres veces en los últimos cinco años las que son eliminados en el feudo rojiblanco.
Ni un minuto hubo que esperar para ver el primer gol, y es que la previsible salida en tromba del equipo local acabó con gol de Guruzeta en la primera ocasión del partido cuando todavía no se había transcurrido ni un solo minuto. A partir de ese momento pocas ocasiones se vieron por ninguno de los dos equipos y el partido entró en una fase de barrena hasta que una jugada desgraciada de la defensa del Athletic acabó con un balón rebotadoren Robert Lewandowski que se introdujo en la red para poner el empate a uno. El gol del empate dejó tocado al Athletic que cuando todavía no se había repuesto del uno a uno vio como el joven Lamine Yamal en una gran jugada desde la banda derecha, acababa disparando cruzado pegado al poste haciendo imposible la estirada del hoy meta titular del Athletic Julen Aguirrezabala, y poniendo el uno a dos en el marcador cuando se llevaba media hora de partido, finalizando la primera parte con ventaja visitante.
En la segunda parte el técnico local Ernesto Valverde introdujo introdujo por el terreno de juego al canterano Unai Gómez para sustituir aún muy desacertado Mikel Vesga, y el Athletic volvió a salir con mucho ímpetu consiguiendo la recompensa del gol del empate por medio de Sancet cuando todavía no habían transcurrido cinco minutos de la reanudación. Al contrario que tras el gol del de la primera parte, el Athletic siguió buscando con ahínco la meta contraria, si bien el Barcelona en dos ocasiones clarísimas del joven Lamine Yamal pudo haber puesto en ventaja al cuadro culé y haber evitado la prórroga, sin embargo el dos a dos no se movió del marcador y así finalizaron los noventa minutos reglamentarios.
En el tiempo extra el Athletic no notó el bajón físico, y el técnico visitante Xavi Hernández ,que vio como Balde y Christensen se lesionaron durante el partido debiendo de gastar dos ventanas de cambios en dichas lesiones, introdujo a Sergi Roberto en lugar de dar entrada a Fermín López o Vitor Roque. En la última jugada del primer acto de la prórroga una presión del Athletic a la salida del balón del Barcelona surgió efecto y Asier Villalibre asistió para Iñaki Williams que recién llegado desde Costa de Marfil anotó el tercero para su equipo.
En la segunda parte de la prórroga el Barcelona no consiguió inquietar la portería visitante, y cuando solo quedaba un minuto para el final, una jugada de ataque local con el Barça volcado acabó con Nico Williams anotando con el exterior y por la escuadra el 4-2 definitivo quedaba el paso a su equipo y provocaba el delirior en la Catedral.
Con este resultado el Barcelona dice adiós a su segundo título en lo que va de temporada, y por su parte el cuadro del Txingurri sigue soñando con su competición predilecta y con volver a hacer surcar la Gabarra 40 años después.